Gala Varo: Fuerza y resistencia

Me inspiran todas las cosas que rompan las reglas y todo lo que sea revolucionario.

Foto: iEve González | Styling: Viko Navarro |  Producción: Roger SH

Martín Chukunu – La primera pregunta que siempre hacemos en Dixpa es: ¿cómo te llamas y a qué te dedicas?

Gala Varo Mi nombre de pila es Jesús Meza Arroyo, tengo 35 años y soy nacido en Morelia, Michoacán. Vivo en Guadalajara y, anteriormente, me dedicaba a la ciencia como profesor investigador en la Universidad de Guadalajara, pero actualmente me dedico a ser la máxima exponente del Drag de México, ¿¡ay quééé!?

MC – ¿Qué te motivó a hacer drag?

GVPues, el escenario siempre me gustó y disfruto la experiencia de actuar sobre él, además de que le tomé muy rápido el gusto al circo, las artes escénicas y la danza. Eso y que es algo con lo que siempre soñé de chiquito: ser artista. Otra cosa que me motivó, pienso, fue que se me cuestionaba mucho mi género dentro de la escena, el escenario y las artes escénicas. Me preguntaban por qué, siendo hombre, era tan delicadito, tan finito, tan… lo que sea. No me soltaban intentando averiguar en dónde estaba la fuerza o la rudeza del hombre que se suponía que debía expresar. Es algo con lo que cargué siempre y se convertía en regaños y reprimendas al no cumplir con los cánones de género, por no ser lo suficientemente “hombre” o no comportarme así o moverme asá. Eventualmente, terminé cuestionándomelo y sí dije: ¿pues, por qué? O sea, ¿quién lo dijo? ¿Quién dijo que lo que tengo entre las piernas va a decir lo que tengo que hacer?

MC  ¿Cómo fue para ti crecer en un contexto tan conservador y tradicional como el de Morelia?

GVMás que hablar del contexto conservador de Morelia, yo creo que habría que discutir el contexto conservador familiar. Creo que, independientemente de la ciudad en la que vives, ese ambiente conservador puede darse en diferentes ciudades. Y, aunque las experiencias personales varían, el conservadurismo es casi siempre el mismo, pero con diferentes matices y rasgos culturales propios de cada región. Te exige actuar, vestirte, hablar, dirigirte y comportarte de cierta manera, aunque tengas ganas de experimentar, explorar o vivir de otras formas. De alguna manera, agradezco haberlo vivido así, la verdad, porque es algo que me hizo crecer rodeado de cuestionamientos y me hizo preguntarme: ¿qué hago en este mundo? ¿Quién soy? ¿A dónde quiero llegar? ¿Cómo lo quiero hacer y por qué tiene que ser de cierta manera y no de la que a mí me gustaría que fuera? Es muy difícil luchar en contra de lo que se supone que debes hacer y sacrificar lo que tú en realidad quisieras hacer. Es como el yin y el yang del constructo de género en la sociedad: porque sí, está lleno de conflictos y violencias, pero también puede llevarnos a la reflexión de qué papel queremos tener en este mundo.

MC ¿Cuáles son tus referentes? ¿De dónde toma inspiración Jesús Meza para crear a Gala Varo?

GV Principalmente, de la fuerza, de la experiencia, de la androginia, los contrastes y lo que se dice que no debería ser o existir, pero que yo quiero volver una realidad. Para fines prácticos, Gala es principalmente el constructo de la exploración de género, de la fuerza, la belleza y la inteligencia, procurando un enfoque audaz y vanguardista que se inspira en la tenacidad y fortaleza femenina. Me inspiran todas las cosas que rompan las reglas y todo lo que sea revolucionario. ¿Por qué Gala no se hace el “tuck”? ¿Por qué no usa caderas? ¿Por qué no usa esponjas? ¿Por qué, por qué, por qué? Pues, la razón principal es que me gusta romper las reglas dentro del mismo drag. Yo tenía una maestra en danza que me decía: “ya tienes la técnica, ahora, rómpela. Solamente así vas a construir tu propia identidad”. Entonces, bueno, esas son mis inspiraciones: la fuerza de las mujeres, la ciencia ficción, los mundos oníricos de las y los pintores surrealistas y los cómics. Gala es una guerrera.

MC – Tú has participado en tres distintas competencias de drag. ¿Cuál fue tu experiencia en estas plataformas tan distintas entre sí?

GV  Sonará medio trillado, pero soy una persona muy competitiva: crecí en un entorno donde reinaba lo deportivo y lo artístico. En algún momento, incluso, nadaba para la selección estatal y casi que toda mi infancia, pubertad y adolescencia me la pasé en competencias del estilo. Y ya cuando descubrí el mundo escénico, yo venía de ese entorno competitivo y siempre quise ser el mejor y quise demostrar mi valor. Por lo mismo, siento como si las competencias fueran ya una cuestión muy natural para mí. Aunque eso sí, las competencias deportivas son muy cuadradas y tienes que cumplir con ciertos estándares, pero en las competencias artísticas tienes un poquito más de flexibilidad y pueden ser más revolucionarias, puedes jugar más y empujar más los márgenes, las barreras. 

Para el momento en que empecé a hacer esto y sale la convocatoria para *La Más Draga*, me pregunté: ¿lo quieres hacer? Claro que sí. ¿Por qué? No para demostrarle nada a los demás, sino para demostrarme a mí mismo que lo puedo hacer y que soy chingón. Nunca he entrado con la mentalidad de ganar a ninguna competencia, aunque sea el principal objetivo, sino que siempre lo he hecho con la idea de probarme a mí mismo que lo puedo hacer. Y ya si termino ganando, pues, qué mejor. Pero la principal recompensa es que sigo demostrándome a mí mismo las capacidades que tengo: independientemente de que en mi casa no me dejen, de que el entorno social no lo permita, de que esté en un mundo de ciencia y la estructura de la institución no siempre permita el crecimiento o que el mismo drag no vea con buenos ojos ciertas cosas porque “eso no es drag”. A mí me empuja mucho todo este movimiento de comprobarme a mí mismo y a los demás que la manera en la que yo hago las cosas también se vale. He disfrutado mucho este proceso de competir y cada ocasión me ha dejado aprendizajes, me ha llevado a conocerme más y a aprender más de cómo funciono dentro de este mundo, sobre todo emocional y físicamente.

MC – ¿Cómo cambió tu vida *Global All Stars*? ¿Qué puertas te ha abierto el haber participado en ese proyecto?

GVEsas competencias me sacan de mi zona de confort y, honestamente, *Global All Stars* ha sido lo máximo que he hecho en mi vida: no tanto a nivel internacional o profesional, sino a nivel de lo que te decía de mis propios retos personales. No imaginas la experiencia que fue el estar en esta competición representando a un país tan chingón como es México, con la responsabilidad que implica y toda la pasión que nos define y nos hace decir: ese es mi gallo, ese es mi país, eso es lo que soy yo. Sumado a esto, también fue un reto el hacerlo en otro idioma, contra participantes de todo el mundo y contra leyendas como Alyssa Edwards. Cambió mi vida completamente y cambió la percepción que tengo de mí mismo. 

No domino del todo el inglés y sé que no soy del agrado de mucha gente, pero hago el drag que me agrada a mí y soy la persona que a mí me gusta y con la que siento comodidad. Y así como cuando mientes en una entrevista de trabajo diciendo: “sé hacer esto, esto, esto y esto” y sí terminan pidiéndotelo, pues nada. Como dice el dicho en México, no me rajo y me lo aviento, sin importar que en el camino me toque descubrir cómo hacerlo o explorar nuevas alternativas y crecer, evolucionar y revolucionar. Suena intimidante, pero es un proceso donde conectas con personas de diferentes partes del mundo, con diferentes culturas y te encuentras con personas del otro lado del mundo que te ven y dicen:“has cambiado mi vida”, “me has enseñado”, “encontré nuevas formas de hacer drag gracias a ti” o “hallé una nueva forma de amarme a mí mismo y de retarme”. Aparte la exposición internacional del trabajo que estoy teniendo fuera de México, tanto en Estados Unidos como en Canadá, todo Centroamérica, Sudamérica y Europa, esperemos que, próximamente, también lleguemos a Asia. Si me dijeras hace un año o hace dos que yo estaría haciendo esto, te hubiera dicho que estabas loco, pero ahora creo que el cielo es el límite.

MC – Gala, ha llegado el momento Rupaul de esta entrevista. ¿Qué le dirías a tu yo de niño si pudieras hablar con él hoy en día?

GV – A mí yo de niño… ay, me vas a hacer llorar. Le diría que la manera en la que hace las cosas está muy bien, a pesar de que se sienta diferente, se sienta relegado o sienta que no encaja. Le diría que, en algún momento, va a encontrar su lugar y no solamente sentirá conexión, sino que va a crear un espacio más grande y más visible para más personas como él, con sus mismas necesidades y donde se sentirán protegidos, abrigados e identificados. Tendría que avisarle, también, que allá afuera no solamente le romperán la madre y el corazón, sino que también podrá superarse y se convertirá en una persona fuertísima y que se posicionará de una manera que no imagina. Le diría que sea bien chingón, que nunca deje de luchar y que, pase lo que pase, no pierda su sonrisa porque le va a abrir el mundo y le permitirá llegar a más personas. Le diría que es pura luz, es puro amor y que vino a este mundo a dar lo mejor de sí.

MC – ¡Qué bonito! ¿Hay algo más con lo que te gustaría cerrar?

GV – Muchas veces pensamos que no hacemos las cosas de la manera correcta o de la manera en la que la gente allá afuera nos dice que se deben hacer, pero creo que cada persona tiene su proceso, su manera de hacer las cosas y está bien y está correcto mientras no le falten el respeto a nadie, no se metan con nadie más y sean fieles a sí mismos y a sus ideales. Tarde o temprano va a llegar el momento en el que todos esos cuestionamientos potenciarán el brillo de quien los enfrente. A mí me gustaría también que la gente, allá afuera, lo diera todo, que se divierta y acepte que no hay una única forma correcta de hacer las cosas. Quisiera que las personas disfrutaran su momento y su paso por el mundo y este plano, en especial porque nadie sabe si será corto, si será largo, si sus huellas serán eternas o finitas: yo solo sé que hay que aprovecharlo, hay que disfrutar y hay que aprender.

 

MC – Una última pregunta: sabemos que se viene Drag Con, así que ¿qué podemos esperar de Gala Varo?

GV – Ya viene Drag Con, sí, y será mi primera vez en una. Ni yo sé qué esperar, pero lo que pueden esperar de mí es Gala versión 2025: a punto de iniciar una gira larga por Europa en diferentes países, y ojalá que también se den y se multipliquen muchas relaciones públicas que nos permitan seguir creciendo, seguir evolucionando y seguir llevando a México por todo lo alto. Además, claro, pocas cosas me gustarían tanto como seguir representando no solamente a México, sino a Latinoamérica, porque ahora que hice el tour por Sudamérica y Centroamérica, he conectado mucho con, como diría J Lo, mi gente latino. Compartimos tantas cuestiones culturales, tantas cuestiones históricas, venimos de conquistas, de revoluciones. Somos sobrevivientes y es increíble cuando puedes conectar con más personas en otros lados del mundo a través de nuestras vivencias, del arte, el movimiento y la experiencia.